En algunas ocasiones creemos que los demás son
responsables de nuestra felicidad, pero esto es un error, la felicidad depende de uno mismo, cada
persona elige ser feliz o no, la responsabilidad de lograr el estado
de felicidad que deseas está en nuestras propias manos.
La felicidad es un sentimiento que todos los seres
humanos queremos experimentar y disfrutar en todo momento de nuestra vida, pero
el inconformismo que en ocasiones nos define nos hace ponerle un pero a todo: “voy a ser feliz
cuando me case”, y te casas y dices “pero ahora cuando tenga hijos”,
y así va transcurriendo la vida y no disfrutamos el momento presente por estar
esperando un futuro, que no sabemos si vaya a llegar.
El
sociólogo John P. Robinson,
coautor y pionero en los estudios sobre el uso del tiempo, destaca que el ver
la televisión es una actividad que utilizan las personas para escapar de su
realidad, es algo que no tiene un costo y que lo pueden hacer solos y genera un
estado de bienestar momentáneo; los libros y las relaciones sociales son lo
ideal para que las personas se sientan felices, pero como es algo que rendirá
frutos a largo plazo, a las personas no les llama la atención.
Existen obstáculos que nos impiden ser feliz y
disfrutar de los pocos o muchos momentos que tengamos de felicidad en el
transcurrir de la vida, a continuación mencionamos algunos.
1. La rutina. Este obstáculo es el más grande de
todos y el que con mucha seguridad nos impide ser felices, cuando tu vida gira
en una monotonía, donde ya no existe nada nuevo que contar ni que experimentar
es donde perdemos por completo la felicidad, ya nada nos asombra ni estremece nuestro
ser, vivimos en un mundo plano.
2. Miedo. El miedo es
un sentimiento que paraliza a las personas, por lo que genera en tu
subconsciente un estado permanente de infelicidad, preocuparte de más no te dará ningún
beneficio, por el contrario, no te permitirá disfrutar de lo que
estás viviendo en tu presente.
3. No
disfrutar.
Somos tan incapaces de disfrutar el momento que no vemos la felicidad que
tenemos frente a nosotros por estar esperando a que mañana sea un día mejor,
que si hoy me regalaron una flor mañana sea un ramo para estar más feliz. Es momento de
disfrutar el presente, ser más asertivos en lo que hacemos y en lo
que tenemos; no
hay momento perfecto, tú lo haces perfecto.
4. Sentirte
víctima.
Hay personas que viven una vida donde son víctimas de todo lo que les sucede:
las frases de "si
sólo tuviera" o "si sólo pudiera", son sus mejores
alidadas, pero vivir así no es vivir, sólo en ti está el poder de decir sí o
no, en tu vida el
único culpable de tu infelicidad eres tú, despierta ya, que hay un
mundo maravilloso esperándote.
5. El enojo. Vivir
enojados con la vida es algo que pasa cotidianamente, si algo no sale bien es
porque la vida me trata mal, y como algo pasó que no me favorece entonces me enojo y
culpo a otros de lo que me pasa y posiblemente peleo con quien tenga
oportunidad, la finalidad es sacar ese coraje y explotar. Pero cuidado, esto no
es más que un mal momento y seguro va a pasar, pero si en tu rato de enojo
agrediste, insultaste o lastimaste a alguien, ten por seguro que va a quedar en
el corazón de esa persona a la que le hiciste un mal día.
6. Reglas. No puedes
esperar que el mundo viva de acuerdo como tú quieres vivir, las reglas que
tengas en tu vida, no se adaptan a las de todo el mundo, y también es
importante respetar
las que tengan los demás; no porque vivas infeliz porque algo no te
parece, éstas van a desaparecer o a cambiar.
7. Preocuparte
de más.
Es difícil no preocuparse, porque siempre habrá algo que nos genere este
sentimiento, lo
importante es no hacerlo de más, trabaja en esas cosas que
puedes solucionar, y eso, de lo que estás consciente que no puedes cambiar,
elimínalo de tu mente o, por lo menos, haz que no te afecte.
8. Odio. Odiar a
alguien es un sentimiento que te afecta directamente a ti, porque posiblemente
la persona odiada ni lo sepa, el odio envenena el alma y es un obstáculo que te
impedirá la felicidad, si algo te lastimó, dale la responsabilidad a quien le corresponda, limpia tu
alma y verás que todo tiene un color diferente.
9. Perdonar. Esta palabra
es complicada, ya que no es nada fácil practicarla: podemos olvidar
posiblemente, pero perdonar de corazón, no todos lo podemos lograr. Es
importante identificar que si no perdonamos de corazón no nos daremos la oportunidad
de estar tranquilos y en armonía con nuestro ser, ya que siempre
cargaremos esas cosas que nos duelen y lastiman el alma. Hay que intentarlo y
si se logra hacer, sin duda un sentimiento de paz invadirá nuestro corazón,
estando brillante e irradiando felicidad para dar y recibir.
10. Pesimismo. El pesimismo,
al igual que el optimismo, tienen un reflejo similar: las personas que viven
con el pesimismo cargando, todo lo ven mal y sienten que sólo a ellas les pasan
cosas malas, pero inconscientemente con ese pensamiento tú las estás llamando,
si cambiamos los malos pensamientos por buenos, seguramente éstos llegarán, todo está en la
manera en la veamos la vida.
En un estudio realizado por sociólogos de la
Universidad de Maryland, recopilaron información acerca de las actividades que
se realizan en los tiempos libres, y descubrieron que éstas son un indicador de
la felicidad o infelicidad de las personas, los resultados son sorprendentes:
las personas que no son felices son las que pasan más tiempo viendo la
televisión, a diferencia de las personas que se consideran felices, éstas usan
su tiempo en leer y socializar con más personas. Este dato nos puede ser de
mucha ayuda para saber hacia dónde se encamina nuestra vida, tan simple como
leer o ver television. Las personas infelices ven 20% más televisión que las
felices.
La verdadera felicidad es algo que crea cada persona en su corazón y
lo adopta como un estilo de vida, que permite vivir plenamente
disfrutando cada momento y disfrutando de las personas que tenemos a nuestro
alrededor y forman parte de ella, amar desinteresadamente, hacer el bien sin
esperar nada a cambio, hacer más, sonreír y darnos cuenta que la vida es un
tesoro maravilloso que, mientras lo tengamos, debemos aprovechar y disfrutar.
Haz un examen de conciencia y date cuenta de lo que has vivido y de aquello que
no te ha permitido ser feliz, elimínalo de tu vida y empieza hoy a crear una
nueva historia llena de momentos de felicidad.
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