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dimarts, 8 de gener del 2013

Romper las reglas. Gaspar Hernàndez.


No solo los futbolistas, los artistas y los niños necesitan jugar: ahora deberíamos jugar todos
«El esfuerzo de inventar bloquea la inventiva», diceluna Albert en '¡Sincroniza tu vida!'
EI hemisferio izquierdo del cerebro es la base del pen­samiento lógico y racional. En Occidente hemos sido educados casi como si no existiese el otro, el derecho. «Tenemos que recuperarlo y usarlo», afirma Juna Albert, licenciada en Física porta Uni­versitat de Barcelona, master coach PNL (programación neurolinguís­tica) y autora del libro ¡Sincroniza tu vida! (Ediciones B). En él explica ejercicios y técnicas que permiten equilibrar la rigidez del hemisferio izquierdo y la nula eficacia -en de­terminados contextos- del pensa­miento racional. Digo yo que en esta situación de crisis económica, difícil­mente seremos creativos, capaces de idear nuevas soluciones solo con el hemisferio izquierdo del cerebro.
Juna cita a Nancy Adler, experta en management (administración) en la Universidad McGiIIdeMontreal, quien aboga por la necesidad que la sociedad, en general, y las empresas, en particular, tienen de «estar cerca de» los artistas en concreto, como líderes inspiradores, porque su per­cepción está menos condicionada, porque su formación artística les ha llevado a tomar conciencia de que no hay una única manera de ver y sentir. Urge, según Juna Albert, una reconciliación entre nuestra inteli­gencia racional y la emocional. Como decía Carl G.M Jung: «La creación de algo nuevo no se logra con el inte­lecto, sino por el instinto lúdico que actúa desde una necesidad interior. La mente creativa juega con los ob­jetos que ama». Y, según la autora, también para realizarnos personal­mente hemos de recuperar las facul­tades de la intuición e imaginación reativa propias y únicas del hemis­ferio derecho. «La imaginación es más importante que el conocimien­to», dijo Albert Einstein.
Y, sin embargo, la rigidez que flota en la atmósfera es notable. Vamos todo el día enganchados a unas pantallitas que conllevan una forma distinta de relacionarnos con los otros, con el mundo, que han sido creadas por el hemisferio derecho y, sin embargo, este nuevo paradig­ma no se nota a la hora de tomar decisiones económicas ni políticas ni empresariales.
Toman las decisiones directivos que solo parecen usar el hemisferio izquierdo. O sea, repiten más de lo mismo. Al paso que vamos, corre­mos el riesgo de padecer lo que el doctor Ewald Bbhm llamó «la neu­rosis de la decapitación», a costa de pensarlo y discutirlo todo para no llevara cabo nada.
Lo que solemos hacer para bus­car soluciones nuevas y creativas a problemas hasta entonces no resueltos es realizar un examen racional de todas las posibilidades. «Pero por desgracia», leemos en el libro de Juna, «el esfuerzo de in­ventar bloquea la inventiva. Porque crear prevé la superación de los co­nocimientos dados y/o la apertura de nuevas perspectivas». En ese sentido, romper reglas es una for­ma de buscar soluciones. Como hizo Newton, rompiendo las reglas de los esquemas habituales de pensa­miento y el statu quo imperante.
Juna Albert da muchos otros ca­minos para hacer posible lo imposi­ble. Porejemplo,el haz como si...Blai­se Pascal dijo: «Haz como si tuvieras fe y la fe no tardará en llegar». Este y otros ejemplos pasan por sincroni­zar nuestros hemisferios cerebrales y desafiar mediante la imaginación propia del hemisferio derecho lo que ya sucedió, los viejos paradigmas. Pero, para eso, hace falta saber que no solo los futbolistas, los artistas y los niños necesitan jugar. Aunque parezca mentira, es­tando como están las cosas, debería­mos jugar todos.


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